Antes de comenzar el curso, antes de que cada uno enfile su pasillo y busque el número de su aula, antes de abrir los cuadernos y los libros de partituras, antes de reconocerse los unos a los otros y alegrarse por el reencuentro, antes de todo eso, tenemos que hacer justicia al hueco que han dejado los que se fueron, alumnos de 6º que este año completarán su formación en otros centros, y a los que echaremos mucho de menos; y reconocer, también, el aporte de los que se quedan un poquito más, pues saben que serán la referencia para los más pequeños, y su experiencia nos ayudará a todos.